Este Otoño viene cargado de una serie de relevantes exposiciones. Hoy voy a hablar de «Los Fauves: La Pasión por el Color» en la Fundación Mapfre, Paseo de Recoletos (Madrid), del 22 de Octubre de 2016 al 29 de Enero de 2017.
La muestra, que hace una completa y cuidada presentación del fauvismo, reúne más de un centenar de pinturas, así como numerosos dibujos, acuarelas y una selección de piezas de cerámica.
El fauvismo es sinónimo de libertad, de fuerza, de transgresión. En la pintura fue el estandarte de la revolución del color, de la ausencia de la perspectiva y del desapego a la tradición. La intensidad y la vitalidad arrolladora de un grupo de jóvenes artistas formados en distintos talleres modificaron el curso del arte en la primera década del siglo XX.
Henri Matisse fue su representante por excelencia y estuvo acompañado por otros artistas con los que compartió una nueva visión de la pintura y un deseo constante por aprender y experimentar. Él junto a André Derain y Maurice de Vlaminck lideraron el grupo, en el que también se incluyeron Albert Marquet, Henri Manguin, Charles Camoin, Jean Puy, Raoul Dufy, Othon Friesz, Georges Braque, Georges Rouault y Kees van Dongen.
Estos defensores a ultranza del color exacerbado y de la ejecución de la obra a través de la percepción individual desarrollaron varios temas con especial dedicación, como los retratos entre los miembros del grupo, los paisajes lumínicos, la atmósfera del mediterráneo francés, los espacios intimistas y la sórdida atmósfera nocturna.
En este breve, pero apasionado periodo artístico, los fauves sucumbieron a las fuentes del postimpresionismo de Van Gogh, Cézanne y Gauguin y al neoimpresionismo de Signac, de tal manera que el conjunto de su obra se consideró como una revelación única para el cubismo y el expresionismo, dos de las vanguardias más relevantes de principios del siglo XX.
La obra de Jean Metzinger
Como le ocurre a la mayoría de los artistas su obra transcurrió, evolucionando, desde el Fauvismo y el Neoimpresionismo hasta el Cubismo.
http://olga-totumrevolutum.blogspot.com.es/2013/06/el-cubismo-de-cristal-jean-metzinger.html
Es el primer movimiento dentro del siglo XX de vanguardia frente a una serie de corrientes que surgen a fines del XIX -principios del XX- cuyo lema es la austeridad, el color; el fauvismo se presenta como un verdadero fogonazo de color. Un fogonzado de carácter revolucionario. Es que el fauvismo nace en el año 1905 como una verdadera explosión.
¿Qué ocurre en ese año? Que un grupo de pintores que habían pasado el verano juntos, trabajando, pintando en la localidad francesa de Colliure, decide presentar el resultado de ese trabajo en la exposición, en el salon de otoño que se celebraba anualmente de manera continuada desde 1903. Era un salón abierto a las nuevas propuestas y ellos presentan allí su obra. El vicepresidente del salón (Grand Palais de Paris) decide reunir todos esos cuadros en una misma sala porque la manera de trabajar le pareció que tenían unos rasgos comunes, y por coherencia los juntó. Uso de un color estridente, chirriante. ¿Qué impresión causó en el público y la crítica esa sala? Pues el prestigioso crítico Luis Bousel denominó a la sala: la jaula de las fieras. Un verdadero escándalo.
Dura muy poco porque en 1908 los pintores comienzan a disgregarse y para 1910 el grupo esta ya superado. Aclaración: frente a o anterior, que un pintor pertenencia a un movimiento; pero ahora los fauvistas no dejan de pintar y Matisse morirá en el 53 siendo un fauvista.
Los orígenes del Fauvismo
Henri Matisse (1869-1954) pintor francés máximo representante del fauvismo, primera de las vanguardias artísticas del siglo XX, caracterizada por el uso de pinceladas y colores desmesurados así como por una representación de la violencia de las emociones.
El nombre de fauvismo fue otorgado por Louis Vauxcelles, crítico francés, a las obras expuestas en 1905 por un conjunto de jóvenes artistas en el Salón de París, lugar donde pintores noveles entraban en concurso exponiendo sus obras ante el público. Así, cuando el crítico vio las creaciones de Matisse, Vlaminck o Derain, exclamó: «Donatello parmi les fauves», es decir, «Donatello entre las fieras», de donde derivó la expresión fauvista. Lejos de tomarlo como un insulto, este término fue adoptado para definir esta corriente de muy corta duración e irregular en sus protagonistas pero que tiene en común la agresividad, las emociones y la furia con la que se trazan las pinceladas así como el uso intenso del color a través del cual- como veremos principalmente en la obra de Matisse- expresan emoción. Además, y como ocurrió con el resto de vanguardias, estos artistas de principios del siglo apostarán por los sentimientos y el mensaje interno de las obras mucho antes que por el dibujo, las líneas clásicas o los juegos de perspectivas y es que, muy lejos del orden antiguo, los cuadros tienen un plano único, herencia de Gauguin.
Introducción a la obra de Henrry Matisse
Matisse, autor-bisagra entre las tendencias de finales del siglo XIX y las vanguardias de principios del siglo XX, comienza su preparación artística junto con Gustave Moreau- representante del primer simbolismo- en la Escuela de Bellas Artes, donde estudia obras de los más importantes impresionistas, pintores que, por primera vez, se saltan las reglas clásicas e imponen un nuevo modo de crear arte donde, como ya hemos dicho, las emociones del artista se sitúan en primer lugar de la composición. Así cuando se produce la presentación de la obra de Matisse ante el público en el Salón de 1905, él ya había elaborado una serie de obras que distaban de los gustos más tradicionalistas: en 1879 creó su obra La mesa del comedor, en 1899 Naturaleza muerta a contraluz o Ventana abierta, en 1905. En ellas se muestra una clara influencia impresionista tanto en los colores, las pinceladas y las figuras así como en el tema y el uso de las luces y las sombras, los claros y los oscuros, aunque suyo es el uso arbitrario de rojos, verdes, azules y violetas que, lejos de registrar la realidad, reconoce un mundo donde los árboles son morados, los mares amarillos y los rostros azules.
http://www.arteespana.com/henrimatisse.htm
- Henry Matisse. Es el único pintor que teorizó sobre el grupo. No tiene manifiesto.
- André Derain
- Maurice Vlaminck
- Raoul Dufy
- Albert Marquet
- Charles Camoin
- Henri Manguin
- Émile Oton Fiesz
Los fauvistas no forman un grupo cohesionado, pero esto va a ocurrir muchas veces en los movimientos del arte del siglo XX. Cada artista tiene su propia personalidad. En el fauvismo cada uno trabaja por separado, solo se juntan para algunos proyectos como exposiciones. Pero se le ha definido como grupo y como grupo los vamos a tratar, pero sus contactos fueron muy puntales. La mayor parte de ellos pertenecía a una clase social media, tan solo Matisse tenia estudios universitarios y no son intelectuales, no les intereso el ámbito de la teoría sino que se dedicaron sobre todo a pintar y expresar a través de los pinceles, sentimientos, estados de animo, su forma de entender el arte, la vida… No están interesados en el arte anterior. Algunos como Vlaminck se jactan de no haber pisado nunca un museo (no Matisse).
http://www.elarteporelarte.es/h-matisse-y-el-fauvismo/html
http://olga-totumrevolutum.blogspot.com.es/2011/09/el-fauvismo-la-impetuosa-tormenta-del.html
http://olga-totumrevolutum.blogspot.com.es/search/label/Fauvismo
A Henri Matisse ya le dediqué una entrada
https://creciendoentreflores.wordpress.com/2016/02/17/las-flores-en-la-pintura-vii-las-flores-estan-en-cualquier-lugar-solo-hay-que-saber-verlas/
http://www.arteespana.com/henrimatisse.htm
http://cincodias.com/cincodias/2016/10/20/sentidos/1476987410_606440.html
Referencias
MªÁngeles Pozuelo