Este Jardín no es un jardín al uso y su nombre no lo encontraréis en Internet. Se trata del jardín que, un profesor muy especial que tenían mis dos hijos mayores en Primaria, cuidaba con amor y esmero. El profesor se llama Eusteriopero en aquellos tiempos en los que el trato de respeto obligaba a poner el Don delante, hizo que mi hija creyera que formaba parte de su nombre, de modo que Eusterio, pasó a llamarse Doneusterio. Creo que la primera vez que oí y vi hablar de un Ginkgo biloba fue a él. El había plantado uno en el jardín del colegio y lo cuidaba como si de un hijo suyo se tratase o como si de otro de sus queridos alumnos se tratara.
Espero poder coincidir con él en alguna ocasión y hacerle llegar este sencillo homenaje. Es una entrañable persona que sentó las bases del conocimiento de mis dos hijos mayores y se atrevió a quitarle algún diente a medio caer y que nos regaló algunas plantas que estamos viendo crecer como el pittosporum.
Hoy miro el descuidado Jardín del colegio y siento nostalgia de aquella época aunque evito caer en la frase «cualquier tiempo pasado fue mejor» porque creo que lo mejor es el presente y lo que está por venir. A pesar se todo, el Ginkgo sigue allí y ha sabido adaptarse a nuestra extremas temperaturas.
En el jardín habitaban y habitan algunas otras especies, unas mejor conservadas que otras :
almez
olmo
melia azederach
pino
olivo
arce nagundo
acacia
lampranthus
gazanias
El Ginkgo es un árbol no solo bello sino muy agradecido que admite muy bien el secado y prensado conservando su color.
Además, se ha utilizado en diseño.
En cristal tallado
En bordados
Y qué mejor que cerrar el año con estas bellísimas imágenes de Asia y degustando un te de Ginkgo
Aprovecho para hacer una curiosa observación. Hoy dia 31 de Diciembre, se acaba de sumar un nuevo seguidor que hace el número 31 igual que el día. Espero que en 2016 se sigan sumando y sigamos «Creciendo entre flores».
A mi hermana Mª Carmen no se le ponía nada por delante a la hora de dibujar, coser o hacer todo tipo de manualidades. Hábil e imaginativa tan pronto se hacía un traje pantalón como tejía con la tricotosa jerseys para sus seis hijos.
Llegó a realizar los más variados trabajos manuales. Al recoger la casa de los padres, algunas de esos recuerdos pasaron a nuestras manos como un espejo de estaño en mi caso. A mi madre le regaló un cuadro de flores realizado a petit point, una técnica que nunca he realizado y que me parece preciosa.
Cojines
Una bolsita de aseo y un alfiletero
Bolso
Collar
De estaño realizó no sólo el espejo de mi madre sino otro para regalar a nuestra hermana Pilar además de unos posavasos muy originales a juego con unos servilleteros en los que combinó estaño y esmalte que acompañaron muchas veladas en la casa familiar.
Espejos
Varios
Posavasos
Una de los objetos que suelen realizarse en estaño son las cajas para guardar cleenex. A mí me regalaron una preciosa. Colgaré la imagen cuando disponga de ella.
Hoy las traigo aquí de nuevo debido a ese amor por las flores secas qe les he contagiado y a ese arte con el que ya están creando sus primeros cuadros, marcapáginas y tarjetas.
Estos son algunos de los cuadros de Marimar
Y algunos de los marcapáginas
de otro lado, Marian para empezar se ha atrevido con un cuadro y ha tenido la gentileza de regalármelo en gratitud por haberla introducido en este pequeño mundo de la flor seca prensada.
Este es el resultado que, para ser el primero, no está nada mal. Siento que la foto no es muy buena.
El cuadrito no iba solo sino acompañado por esta bien escogida tarjeta
Añado las imágenes que me acaba de enviar Marimar de su galería de flores secas prensadas.
Gracias, Marimar, por compartir y enriquecer este blog
Espero poder ir ampliando el repertorio de estas dos amigas y pequeñas artistas.
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Al igual que en la Entrada de ayer comentaba que aprendí a hacer punto a los ocho años, con el gancho no he sido nada hábil. Yo creo que, como todo, se aprende si se ve hacer y en mi casa no recuerdo haber visto a nadie haciendo ganchillo. Como no tuve la oportunidad de conocer a mis abuelas, la verdad es que no se si esta labor estuvo entre sus manos pero desde luego que nunca vi hacer estos primores a mi madre. Si vestimos camisitas o braguitas de ganchillo, desde luego que serían regaladas. Si recuerdo, sin embargo, a una tía, mia tía Elena, que nos hacía unos jerseys muy primorosos para las muñecas y puede que alguno lo hiciera con ganchillo. Recuerdo una mañanita, que me hizo para una de mis muñecas, de color amarillo oro viejo y hecha de lana pero a gancho.
Si en la Entrada anterior colgaba imágenes de colchas hecha a punto de media, hoy cuelgo estas maravillas hechas en crochet. Hablaré en otro momento de cómo indistintamente utilizamos la palabra ganchillo y la palabra crochet, supongo que hermana francesa de la nuestra.
La palabra croché viene del francés antiguo crochet, un diminutivo de croche, que viene a su vez del alemán croc, que significa «gancho».Esta palabra fue utilizada en el siglo XVII en la fabricación francesa de encajes, crochetage fue la palabra utilizada para designar un punto en donde se unen piezas de encaje separadas, posteriormente se utilizó la palabra crochet para designar un tipo específico de tejido y la aguja de gancho usada para producirlo. En el presente se utilizan técnicas derivadas de las utilizadas en la antigua Francia, aunque no son exactamente iguales, se utiliza el término croché o ganchillo para designarlas.El nombre «crochet» varía según el sitio en el que vivas. Por ejemplo, se conoce como haken en Holanda, haekling en Dinamarca, hekling en Noruega, virkning en Suecia y uncinetto en Italia. (Wikipedia).
Para estos días de vacaciones os dejo ideas por si encontráis tiempo para sentaros a tejer.
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Entrado el Invierno y a la caída de la tarde ya apetece sentarse a leer o coser en el sofá cubriéndose con un chal o con una manta de esas que tanto se han puesto de moda. Hay quien la usa para proteger el sofá pero a mí me gusta sentarme sobre el sofá y disfrutarlo.
El chal que encabeza la Entrada fue un regalo que le hice a mi madre por Navidad. Siempre tengo presente a mi madre pero especialmente en estas fechas no solo porque saco su chal del armario sino por lo que la Navidad representó en nuestra familia.
Las labores de aguja me retrotraen también a la infancia. Ahora que las he retomado de nuevo, recuerdo muy bien que aprendí a hacer punto a la edad de ocho años. Fue el verano de Punta Umbría, un caluroso verano como todos, en el que tuvimos la suerte de doblar vacaciones. Estábamos disfrutando tanto que mi padre consiguió prolongar el verano alquilando una casita en la orilla de la playa después de haber finalizado la quincena en la residencia a la que habíamos ido. Se trataba de una casa elevada sobre soportales y construída sobre la arena. No se si sería un modelo emulando las Casas de los Ingleses o una de aquellas casas rehabilitadas.
Dejo aquí algunas imágenes y una foto tomada de la Punta Umbría de la época. Han quedado bien grabadas en mi retina la imagen de esos soportales donde jugábamos y ese porche en el que aprendiera a hacer punto.
La Casa de los Ingleses es un diseño de los arquitectos González García de Velasco y González Vílchez inspirado en el modelo constructivo implantado por la compañía minera Rio Tinto Company en Punta Umbría a finales del siglo XIX. Esta edificación sigue el esquema compositivo de las casas 13 y 14 diseñadas por el inglés Clayton en 1917.
En los dos últimos años he retomado las labores de punto de media y realizado jerseys y cuellos. Tengo iniciada una manta de trozos muestrario, parecida a la que muestra la imagen, que espero poder acabar algún día.
Os muestro algunas que me han parecido preciosas. Las de ganchillo, que son las que más repiten los motivos florales, las mostraré en la Entrada que dedicaré al ganchillo.
Para la butaca
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El madroño además de servir de despensa natural para los pájaros, sirve para decorar o para la elaboración de mermeladas y confituras. No me podía imaginar la de recetas y blogs que he encontrado sobre la elaboración de mermeladas y confituras de este fruto tan peculiar. Yo guardo un especial recuerdo de mi sobrino Luis, el mayor de mis veintisiete sobrinos, y del día que se presentó en casa con una mermelada de madroño hecha por él, doble merito si tenemos en cuenta que no tenía la menor idea de cocina aunque si era un poco atrevido y se lanzaba a cualquier cosa. Nos regaló un bote a mi madre y otros a nosotros y recuerdo que era muy molesto tropezar con esa textura granulada al no haberla pasado por licuadora o tamizarla. Es por ello que me ha extrañado tanto encontrar que haya tanta gente que elabore esa mermelada.
Da gusto poder hacerse con un fruto tan a mano
que permiten elaborar mermeladas y estos postres tan atractivos
Nosotros no tenemos madroños pero en el Parque, al lado de casa, hay muchos. Hay frutos para todos, para los pájaros y para nosotros. En Toledo los gorriones, mirlos y supongo que las urracas los picotean en tiempos en los que, salvo las aceitunas, no hay otros frutos a la mano.
Yo a la forma de los madroños, asocio esas rebecas preciosa de mi infancia que terminaban en una lazada en la que en los extremos había dos madroños.
Así los llamábamos entonces. Mal llamado, porque en realidad son borlones o así se los llama ahora. llama la atención lo inspirador que ha podido ser el madroño tanto a nivel textil como en el campo de la decoración
Y veo que Liliana Lunares en sus creaciones introduce mucho el madroño
Es muy fácil hacer un borlón de lana y he visto, incluso, hacerlos con reciclado de camisetas
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En un día como hoy, no podía dejar de dedicar esta Entrada a estas Vírgenes y Niños Jesús entre flores.
La Navidad, también llamada coloquialmente«Pascua»,es una de las festividades más importantes del Cristianismo, junto con la Pascua de Resurrección y Pentecontés Esta solemnidad, que conmemora el nacimiento de Jesucristo en Belén, se celebra el 25 de Diciembre en la Iglesia Católica, en la Iglesia Anglicana, en algunas comunidades protestantes y en la mayoría de las Iglesias ortodoxas. En cambio, se festeja el 7 de Enero en otras Iglesias Ortodozas como la Iglesia Ortodoxa Rusa o la Iglesia ortodoxa de Jerrusalem,
Los angloparlantes utilizan el término Christmas, cuyo significado es ‘misa (mass) de Cristo’. En algunas lenguas germánicas, como el alemán, la fiesta se denomina Weihnachten, que significa ‘noche de bendición’. Las fiestas de la Navidad se proponen, como su nombre indica, celebrar la Natividad (es decir, el nacimiento) de Jesús de Nazaret.
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En Córdoba transcurrió una parte de mi infancia y los Jardines de la Victoriacon sus árboles, su quiosco de música, sus patos, sus helados, los que junto a mi familia, mis seres más queridos y cercanos, me ayudaron a crecer. La foto de 1958 que encabeza la Entrada bien podría haber sido mía aunque no lo es. Es una pena que antes no se tomaran tantas fotos como ahora lo que hubiera contribuido a reconstruir nuestra infancia.
No puedo dejar de mencionar al barquillero, figura emblemática con la que disfrutábamos los chiquillos de la época
En mi retina quedaron bien grabados, no obstante, esos Jardines y el entonces llamado Paseo de la Victoria donde, además, se encontraba el Colegio de lasTeresianasdonde recibí las primeras enseñanzas.
Como no dispongo de las imágenes de la sede del colegio en los Jardines de la Victoria, pongo la de la Plaza de la Conchaque fue en el que se formó mi hermana Mª José.
El Paseo de la Victoria es una amplia avenida que adoptó su nombre del antiguo Convento Nuestra Señora de la Victoria, desaparecido en el siglo XIX y que engloba varios jardines. Los Jardines de la Victoria, también conocidos como Alameda del Campo de la Victoria datan de 1776, cuando el corregidor Francisco Carvajal y Mendoza concibe el proyecto de crear unos espaciosos jardines a las afueras del casco histórico y para eso mandó allanar los montículos de terreno existentes junto al Convento. Se fué modificando hasta la reforma de 1854 por el alcalde Francisco de Paula Portocarrero, haciendo en el centro un espacioso salón, con asientos de piedra negra y respaldos de hierro. En 1865 el consistorio compró el Convento para su demolición y así ampliar el terreno. Destacan dos instalaciones recientemente remodeladas, la antigua Caseta del Círculo de la Amistad, hoy Caseta Victoria, y el Kiosko de la música, así como una pequeña fuente modernista de principios del siglo XX. La zona norte del Paseo de la Victoria está dedicada al poeta-escritor y político cordobés, Duque de Rivas. Los jardines del Duque de Rivas están situados entre la Puerta de Gallegos y los Jardines de la Agricultura. En el centro de los jardines se erigió en 1929, una estatua del poeta, obra de Mariano Benlliure. Y como fondo del la estatua y para tapar la vista de los antiguos pabellones militares, el Ayuntamiento encargó al arquitecto municipal Carlos Saénz de Santamaría la construcción de una pérgola de estilo neoclásico que a se terminó en 1930, que hoy es una cafetería y sala de exposiciones. Entre la vegetación podemos ver Aligustre, Algarrobo, Árbol del amor, Casuarina , Palmeras, Pino canario, y Tejo entre otras.
En estos Jardines, se celebró hasta 1994 la Feria de Cordoba.
Caseta Círculo de la Amistad
El edificio data de 1877 y fue la caseta de los socios del Circulo de la Amistad y la más antigua de la Feria de Córdoba, que se celebró en los Jardines de la Victoria hasta 1994 para después mudarse a su emplazamiento actual, El Arenal.
Actualmente aloja el Mercado Victoria
El Círculo de la Amistad
Recuerdo muy bien el interior del edificio. Al ver esta imagen, he regresado a mi infancia de tal modo que me he visto jugando y disfrutando y corriendo por sus instalaciones. Sin embargo, no recuerdo la fachada que supongo que habrá sido remozada.
En mi retina solo han quedado las palmeras, no recuerdo otras especies arbóreas aunque ya vemos que hay muchas más incluídos esos preciosos árboles del amor que tanto me gustan hoy y que yo no recuerdo haber visto hasta vivir en Toledo.
El proyecto «Abraza un árbol» me parece una original y excelente idea
Asimismo, me ha parecido precioso este trabajo tan minucioso.
Cierro con esta canción tan evocadora de Peter, Paul and Mary «Where have the flowers gone»
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Desde pequeña debí de dibujar y escribir aunque nada de lo que hice se guardó. Creo recordar que el primer diario lo empecé a los 15 años coincidiendo con la época en la que me empezó a gustar un chico. No era un diario propiamente dicho sino un cuaderno donde iba reflejando sensaciones, pensamientos, reflexiones. Hubo una etapa en la que pasé de escribir diarios a escribir poemas. No recuerdo haber escrito más hasta que hace unos cinco años he comenzado a escribir en prosa asiduamente y siempre llevo un cuaderno/diario conmigo cuando viajo junto con las agendas para secar flores.
Con el tiempo, muchos hemos perdido esa costumbre tan bonita de hacer diarios. Terminan siendo cuadernos muy personales llenos de escritos, dibujos, fechas, entradas de cines, museos o azucarillos, hojas… objetos muy diversos que evocan momentos.
Otros sin embargo, no han perdido esta afición y recogen en cada viaje o experiencia anécdotas guardadas en esos cuadernos. El blog es también un diario para muchos.
He encontrado una web preciosa, Art journaling, que precisamente nos muestra los diarios de periodistas y artistas de muchos lugares, y que están llenos de inspiración, belleza y singularidad.
Ideales para tomar nota y animarnos a hacer un diario de estos días de verano. Mira, mira…
Coincidiendo con el cierre del año, se me acaba uno de mis cuadernos, de manera que estrenaré uno nuevo en 2016. La escritura tiene una probada eficacia terapéutica y ayuda a reflexionar y a autodescubrir la narrativa que utilizamos a la hora de contar nuestras experiencias y vivencias, es lo que se conoce con el nombre de «psicoescritura».
Hay diarios o cuadernos muy variados aunque los diseñadores también suelen elegir motivos botánicos, especialmente flores. Asimismo, las personas que los diseñan de manera artesanal ya sea en tela, fieltro o papel reciclado suelen emplear igualmente estampados o motivos florales.
Los hay realizados con tela o fieltro
Con flores secas y artesanales
Muy originales
Las agendas también se prestan a ello en ocasiones aunque el finen sí mismo no sea ese.
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creciendo entre flores 