Las muñecas
Hasta edad avanzada disfruté jugando a las muñecas, vistiéndolas, cuidándolas y dándoles de comer. Mi padre decía que era ya muy mayor (segun él tenía ya cuerpo de mujer), aunque solo tenía once años en la foto.
Unas veces les daba comida de mentira o legumbres secas pero otras llegaba a prepararles auténticas papillas con leche en polvo y en una ocasión a una de las muñecas llegó a salirle una cochinilla de bola por la boca. Me llevé un susto de muerte.
Historias de muñecas tengo unas cuantas. Yo no conocí las muñecas de cartón piedra pero mis hermanas mayores si.
Si recuerdo que yo tenía de pequeña muñecas de goma maciza. Un día a mi hermano Antonio Luis se le ocurrió abrirla para ver que tenía dentro y la destrozó.¡Menuda llantina me entró!.
Las Mariquitas Pérez y el Juanín hicieron las delicias de niños y mayores. Yo tengo una vecina que las coleccionó durante mucho tiempo.
Otras muñecas
Hablando de muñecas no he podido evitar incluir algunas fotos de esta niña precoz que fue Shirley Temple
Los recortables fueron unos de mis pasatiempos preferidos
Recuerdo especialmente una muñeca a la que le podía cambiar muchos vestidos. Uno de los modelos era un abrigo de armiño aunque yo no tenái ni idea lo que era un armiño por aquel entones, ahora sí.
Otros recortables
También en Alemania
En Inglaterra
http://elbauldehojalata.blogspot.com.es/search/label/MU%C3%91ECAS%20RECORTABLES
Buscando información sobre los recortables, he visto que no solo en Europa sino en otros países, ha habido costumbre de jugar con ellos.
Jugábamos a los cromos
Las niñas jugábamos la diábolo y los niños a la peonza
A la comba
A las tabas, chapas, a las canicas y a los bonis (alfileres), la rayuela (nosotros la llamábamos tanga), a las gomas
Jugar en la playa con la arena y los cubos fue otro de mis juegos preferidos
A los juegos reunidos
Haciendo llaveros de macarrón
Descubrí este fantástico hospital de muñecas en Lisboa (Portugal)
Y un Museo del Juguete de hojalata en Candeleda (Valle del Tiétar)
http://valletietar.com/museocasadelasflores/index2.html
Museo el juguete de Nüremberg (Baviera)
Y otro de juguetes de cartón piedra en Poyales del Hoyo (Ávila)
http://www.gigantea.es/museo.htm
Recuerdo también el Museo del juguete en Figueras (Gerona)
El Museo del barquillero de Santillana del Mar (Cantabria) que más que un Museo del barquillo es un Museo del Juguete
http://otrosmuseos.com/museo-del-barquillero/htlm
http://www.cantabriarural.com/lugares-de-interes/museo-del-barquillero-en-santillana-del-mar.html
Las cocinitas
Otros de mis juegos preferidos : las cocinitas
Los cochecitos
Uno de las cosas que más podía desear era tener un cochecito de capota para pasear a las muñecas.
En la imagen inferior podemos apreciar el cochecito de capota, en el ángulo inferior derecho, y a la niña jugando a hacer de mamá como su madre que acaba de tener un hermanito.
Las casas de muñecas y sus accesorios
Escribí esto sobre “Casas de muñecas” en el año 2013
Casas de muñecas ( 13 de Abril de 2013)
Siempre me gustaron las casas de muñecas. De pequeña recuerdo la de los Alarcón. Cuando me llevaban de visita a su casa, siempre me ocupaba de arreglarla y poner cada cosa en su sitio. La casa de muñecas, al igual que la casa de los Alarcón en general, siempre estaba patas arriba.
De mayor ha habido dos personas que me han vuelto a hacer añorar las casa de muñecas : la madre de una compañera de Pablo y una de mis pacientes, Yasmina.
A Paloma, la madre de Carlota, le regaló la casa de muñecas Santiago, su marido. Yo envidiaba ese regalo igualándolo al amor que se tenían. Pensaba equivocada que alguien que regala algo así a una mujer, es alguien que la quiere mucho y que está muy enamorado.
La casa de muñecas, al ser tan grande, se colocó en un rellano o ensanche de la escalera en el piso superior de su chalet unifamiliar.
Pasados unos años, me enteré de que Paloma y Santiago se habían separado lo que echó por tierra toda mi teoría sobre el amor y el romanticismo.
Para los coleccionistas de casa de muñecas, dejo este enlace
http://lapoupee45.blogspot.com.es/
Este otro blog “La memoria revivida”sobre recrear los juegos y juguetes de la infancia
http://www.lamemoriarevivida.com/2013/05/vamos-la-escuela-3-el-recreo-anos-50-60.html
La educación de la mujer en mi época estuvo orientada al cuidado de la casa y a la crianza de los hijos y todos los juguetes eran sexista. Al niño que tenía inclinación por los juegos “femeninos” (casitas, cocinitas, muñecas) se le consideraba “mariquita”.
Cuentos de Celia
Y qué mejor cierre de Entrada que estas canciones tradicionales en la voz de Rosa León
Huellas de infancia
Los recuerdos de la infancia no sólo nos dejan una huella imborrable sino que también quedan reflejados en nuestra personalidad
Todos para bien o para mal, recordamos situaciones pasadas y en concreto de nuestra niñez Además de conectarnos con la infancia. Los recuerdos tienen mucho que ver con la forma como nos sentimos y comportamos en el presente. Todo el mundo tiene recuerdos, incluso aquéllos que dicen no recordarlos (Mónica Jiménez, psicóloga Clínica, H. Ramón y Cajal)
Construir la propia biografía
A pesar de que, en ocasiones, podemos tener la seguridad de rememorar instantes de nuestra más tierna infancia, los recuerdos biográficos más antiguos se sitúan entre los 2 y 3 años. Sobre la base de los recuerdos biográficos se forma el sentido del yo y de lo que cada uno siente que es. Eso no quiere decir que siempre sean recuerdos verdaderos, ya que pueden ser interpretaciones subjetivas de la realidad vivida o, incluso, imaginada como vivida. Es frecuente que entre hermanos se recuerden cosas diferentes de los hechos vividos en común, incluso, a veces, con interpretaciones discordantes u opuestas. Es decir, los recuerdos ayudan al desarrollo de de nuestra identidad psicobiográfica. Pero ésta también influye en la creación de recuerdos subjetivos.
En otras ocasiones experimentamos sensaciones difusas de recuerdos vividos, a los que después añadimos datos por los familiares o fotografías. En esta caso, generamos lo que se denomina “recuerdo a posteriori”. Incluso puede que algún recuerdo ya existente sobre nuestra infancia cambie de significado, vivencia o sentimiento. Suele suceder cuando años después, recibimos información y eso nos hace revivir el recuerdo en el presente y resignificarlo. Desde este momento , la vivencia del recuerdo es nueva y diferente
Según Jiménez, un entorno estable emocional y afectivo en esos primeros años del desarrollo psicobiográfico, resulta crucial.
Según José Manuel Aguilar, psicólogo Clínico, aquello que recordamos de la niñez, ejerce un valor indiscutible. El presente y el futuro se construyen sobre el pasado. Rememorar ese pasado en la edad adulta, especialmente en los momentos de incertidumbre o dolor, es un tesoro personal y una fuente de salud psicológica
Esto es lo que Mariam compartió de sus recuerdos de infancia
También yo viajo en el tiempo y muchos de tu recuerdos también son los míos . Por ejemplo el muñeco de goma me lo regalaron por reyes un año y fue, hasta bien entrada en la pubertad, mi bebé favorito. Yo le podía dar de comer y beber y tenia un orinalito y hacia pipí. Mi ama me hacía chaquetitas, baberitos y faldoncitos de piqué. Era como un bebé al estilo del Norte, copia de los bebés ingleses a los que en realidad se imitaba. Mucho lazo ….y pomposidad. Mi tío Gustavo, tenía una fábrica de muebles en Balmaseda, era un taller familiar en la que trabajaban hermanos , hijos, sobrinos y unos cuantos operarios. Eran artesanos ebanistas y en unos reyes me hicieron un dormitorio en miniatura para mi bebé . Una cama, una mesilla de noche y un armario con tres puertas, perfectamente barnizado y con las balditas y todo. No te puedes imaginar qué ilusión me hizo aquello, jamás lo olvidaré.
En otra ocasión, los reyes me trajeron una cocinita gigante….hasta con una fregadera y un grifo de aquellos dorados. Encima de la fregadera había un depósito de agua que se llenaba y era todo un placer……Cuando nos marchamos a Las Arenas en Balmaseda hubo que dejar muchas cosas, pues íbamos a una casa muy pequeña en comparación con la casa de mis abuelos.Y la cocinita se la regalé a una niña que era vecina nuestra y amiga mía. La cocinita supuso para ella el mejor regalo de su vida. Dejé de verla pues…más de 50 años. Nos volvimos a encontrar hará cosa de tres años….ahora vive en un pueblo de Navarra y aprovechando que estaba cerca de Tudela…..bueno pues me recordó lo de la cocinita. Todavía la conserva. Jugó ella, sus hijos y ahora sus nietos. Para sus hijos soy la amiga de la cocinita.
Aunque nos hemos criado en lugares bien distintos y alejados, sin embargo la cultura no deja de ser la misma y las vivencias infantiles muy parecidas, de modo que tus historias….pues en cierto modo son las mías.
Animo a los seguidores a que nos cuenten sus recuerdos de infancia y nos hablen de sus juegos y juguetes.
Aprovecho para recordar a los seguidores que para hacer una comentario deben de pinchar en el título de la Entrada para que se actualicen los comentarios y poder emitirlos.
MªÁngeles Pozuelo